¿híbrido o eléctrico?

En estos tiempos azarosos el ahorro de dinero es uno de los imperativos. Con respecto a las tecnologías híbridas y eléctricas se han cernido una serie de mitos que mucho les ayudan pero que también a veces las ridiculizan cuando salen a relucir investigaciones científicas como la que protagonizó la compañía Lease Plan.

¿Qué ocurre con estas tecnologías? Pues que sus costos son muy altos todavía, por lo que los precios en el mercado son igualmente elevados. En ello influyen los seguros, impuestos, gastos de mantenimiento, neumáticos, entre otros factores.
El estudio utilizó una serie de parámetros basados en las pruebas de conducción, para analizar el gasto de combustible o de electricidad y los resultados de los cálculos de los costes asociados. El Director de Marketing y Comunicación de LeasePlan, David Henche, argumentó que la eficiencia no solo puede basarse en el tema del consumo de energía, por lo que se han centrado en otros factores.
Y la compañía pone ejemplos: con un recorrido mixto con prevalencia en la autopista -algo habitual para las personas que viven en grandes ciudades- utilizando diesel se ahorran unos  600 euros sobre un motor de gasolina y respecto a un híbrido unos 2.000 euros. Esta diferencia es mucho mayor con respecto a un eléctrico, ya que en seis años el ahorro sería de unos 20.000 euros.

Sin embargo, un mayor recorrido por las carreteras convencionales equivaldría a que con la combinación con la circulación urbana y en menor cuantía con la autopista, los vehículos de gasolina sean más eficientes.
El híbrido, por su parte, es más eficiente en las ciudades. Si el recorrido es eminentemente urbano, el ahorro de dinero sería con respecto a un gasolina de 100 euros, con un diesel sería de 450 euros y con un eléctrico, de casi 12.000.
¿Qué ocurre con los eléctricos? Pues que, aunque su gasto energético es muy inferior al resto, su elevado costo hace que su eficiencia disminuya, lo que queda ratificado incluso en la conducción urbana  que es su plato fuerte.