Objetos de trabajo en el campo
Entre las más populares de las muchas cosas que se coleccionan hoy en día, se encuentran las llamadas antigüedades de campo, quizá sea que porque existen en muchos lugares y en gran cantidad, esa variedad de las mismas permite que un pequeño como gran coleccionista se haga de algunos elementos a su gusto, pero también porque se ha convertido con el tiempo en un agregado dentro de algunos estilos de decoración, así que son cada día más reconocidas y cotizadas.
Entre estos elementos propios de ámbitos más rurales se encuentran los utensilios de trabajo como arados y otros artículos de labranza, sillas de montar, sombreros, y aperos, existe realmente una enorme cantidad de antigüedades en este sentido. Las mismas se adquieren a través de tiendas especializadas y en muchos casos en mercadillos porque son más accesibles y no necesitan tanto cuidado.
Pero dentro de esas mismas antigüedades campestres se colocan los enseres domésticos utilizados en el campo para la elaboración de alimentos o como muebles de hogar, ya sean platos, vasos y otros utensilios, lo mismo que floreros, cuadros, y además, aunque más raramente, textiles como alfombras, edredones y otros, estos últimos que añaden la calidad de artesanía a una antigüedad que se puede convertir en un importante elemento decorativo dentro de las mencionadas corrientes del diseño que contemplan la decoración “rústica”.