Importancia del Salón de Madrid de cara al 2014
Es la tercera urbe más poblada de Europa, con poco más de unos seis millones de habitantes. La inmigración exterior resulta uno de los elementos más significativos de los últimos tiempos para hablar de que en Madrid hay un crecimiento demográfico sostenido.
Las principales autovías que tiene la urbe tienen un recorrido radial. La red del metro es muy eficiente y posee casi 282.000 kilómetros de distancia. Los autobuses son numerosos y cuentan con unas 194 líneas.
En cuanto al tema movilidad personal, Madrid se ha visto resentida en los últimos años por las difíciles condiciones económicas del país y de sus ciudadanos, lo que ha repercutido en un parque automotor detenido en cierta medida en la última década. Claro, siempre se han mantenido la tradición consumista, y todo el que ha tenido la posibilidad ha apostado por comprarse un auto, e incluso el que no la ha poseído también lo ha hecho a base de riesgosos créditos. Por ello, el lujo no ha faltado en las carreteras madrileñas.
Los planes que ha impulsado el gobierno español para lograr acelerar el mercado y la industria de manera paulatina han ido surtiendo efecto y ya se puede hablar optimistamente del futuro cercano del automovilismo en Madrid y en España en general.
Precisamente, hablando de crisis económica es que sale a relucir el tema del posible cierre del Salón del Automóvil de Madrid, evento bianual que puede sucumbir ante la consiguiente concentración de las presentaciones del sector en los eventos más prestigiosos del mundo, con lo que los salones más pequeños, como este, se quedan sin novedades que traerles a sus seguidores.
Nunca ha sido reconocido como uno de los principales salones internacionales de mundo, sin embargo el Salón de Madrid ha servido como escenario de introducción de varias marcas de automóviles en Europa. La edición del venidero 2014 todavía es una incógnita. Lo que se sabe ya, si el gobierno español y las autoridades del sector deciden ceder ante las presiones internacionales de cero novedades, el Salón de Barcelona permanecerá y el de Madrid quedará relegado al olvido.
